La sonrisa ante lo atroz



La sonrisa ante lo atroz

-El morro está muy prendido, yo allá no me meto de noche, no, eso está más caliente.

Tira su cuerpo ligeramente hacia atrás, recostando su espalda contra la silla y sonríe. Yo he visto ese gesto antes. Lo vi en el documental de “La Sierra” cuando el joven al que le decían “Manco” decía, recostado en una palma, que todos ellos estaban condenados a morir temprano, que así eran las cosas acá; también lo vi en otro documental que se llama “Favela uprising”. Esta vez era un joven de más o menos 16 años narrando cómo allá en la favela más grande de Rio de Janeiro se usaba cortarle uno a uno los dedos a las víctimas de los grupos delincuenciales. 

Y ahí, en plena consulta, con el joven sentado enfrente de mí, de nuevo surgió una pregunta a la que no he podido dar respuesta: ¿Por qué aparece en ciertas ocasiones la sonrisa ante lo atroz? Se me aparecen palabras como goce, fascinación con la muerte, también pasa rauda la palabra mirada, pero ninguna de ellas es capaz de formar una respuesta que me deje conforme. Hoy, antes que pretender lanzar una propuesta, quisiera escuchar puntos de vista sobre esta enigmática sonrisa.

Comentarios

  1. "la hostilidad inhibida sólo espera la oportunidad de lograr su satisfacción".
    Sera que esa sonrisa genera culpa?

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  2. La sonrisa es un enigma (no es sino mirar la Gioconda). Esconde detrás de los labios rastros de goce. Surge adoptando formas engañosas, es una mascara, pero sobre todo es una respuesta ante lo que las palabras no alcanzan a manifestar.
    No tiene un significado especifico, a veces es irónica, otras alegre, muchas veces falsa. Encierra incredibilidad, asombro y muchas veces es la respuesta ante el horror. Otras tantas es resignación mientras que en algunos momentos es el insulto, y la burla por excelencia.
    Lo macabro fascina y seguirá fascinando, hasta que un dia cruce la barrera de lo imaginario y se instaure en la realidad personal. Ese día la sonrisa que surge ante lo macabro ajeno,lejano, se torna en el grito insoportable de lo macabro tangible, propio, en el cuerpo, la mente, y el espíritu. A lo mejor la sonrisa es esa barrera que separa, o el escudo que defiende a una persona frente a a una realidad macabra que se instaura con fuerza en los otros y le coquetea tímidamente.
    Así como la Gioconda...la sonrisa seguirá envuelta en el misterio, en el enigma de lo subjetivo, aquello que se calla por que no sabe como salir, y por lo tanto se asoma entre los labios.

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